LA SEDUCCIÓN VIENE CON SOUNDTRACK
Después de leer sus comentarios sobre el post anterior y de comprar a sol el "Manual del Pendejo" en un semáforo, me quedé pensando en el personaje del “jugador” y vaya que se aplica a ambos sexos. Hay jugadores y jugadoras. Pero creo que jugador no es solo un sacavueltero y mentiroso profesional, sino una forma un tanto vulgar de llamar a quien utiliza o ha utilizado alguna o muchas veces las reglas, truquitos o conductas especialmente diseñados para ganar en el conocido juego de la seducción. Por lo general, la estrategia es diferente en ambos géneros. Lo que sí es común a ambos es el propósito: conquistar.
Las mujeres jugamos y lo disfrutamos, (que tire la primera piedra la que nunca lo ha hecho) por la simple razón de que, así como a ustedes, a nosotras de vez en cuando, o mejor dicho, cuando nos da la gana (depende de cada una) pasamos un buen rato con uno que nos guste. Trucos no nos faltan.
No sé por qué el recuerdo de alguna noche (día, tarde o madrugada) en la que he salido a la cancha, o mejor dicho, al bar, fiesta o discoteca más cercano, dispuesta a coquetear a discreción, siempre trae a mi mente canciones, esas, por lo general, muy malas que pongo a todo volumen mientras descuelgo el peligroso vestidito negro y me pinto con mi lápiz de labios favorito de la temporada, en este caso, color “velvet teddy” (¿osito de terciopelo? - p.s. ¿quién les pondrá el nombre a los colores del maquillaje?-).
Así que, sin más preámbulos, aquí va mí: cómo ser una jugadora en cinco canciones. Pongan play(er).
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¡Habla, jugadorazo!
EL DUPLETERO: UNA HISTORIA PARA ESPANTAR FANTASMAS
Hace unos pocos días me llevé una sorpresa tremenda que, después de los primeros momentos de shock, se convirtió en una navajita que fue cortando de a poquitos y luego a arañazos tipo Freddy Krueger –hasta dejar hecha pica-pica- a mi última historia de amor (ahora de horror), esa que había decidido guardar en mi interior como un recuerdo bonito y que ahora voy a guardar al lado otros temibles doble-cara como El Guasón, Jason de Viernes 13, Dr. Jekyll y su monstruoso Mr. Hyde, Darth Vader y la infaltable pero terrorífica mascarita de Scream.
¿Saben por qué? Porque esa historia que viví llamada Atracción Virtual capítulos uno, dos y tres no la vivimos dos personas, sino tres. Seguir leyendo...
Terror en la primera cita
