La forma más sencilla de cambiarle el look a la sala sin hacer una gran inversión, es reemplazar pequeños detalles decorativos, como los cojines. Puedes colocar unos de diferentes colores y estampados, así le darás alegría, dinamismo y personalidad al ambiente.
Pierde el miedo a las combinaciones, es posible tener cojines de estampados tan diversos, como florales, animal print, clásicos y geométricos, sobre un solo sofá; asimismo, que cada uno luzca diversos tonos.
Para que los cojines encuentren armonía deben tener uno o más tonos en común. (Foto: Shutterstock)
La clave para lograr que los diversos modelos de cojines encuentren equilibrio, es que tengan una o dos tonalidades en común. Por ejemplo: puedes tener uno turquesa, otro de cuadros amarillos y turquesas, otro en degradé de turquesas y, finalmente, otro de líneas rosadas con filos turquesas.
Es importante recalcar que si vas a usar diversas tonalidades, es preciso que el sofá sea de un tono entero y neutro para que el lugar luzca armónico. De lo contrario, opta por usar cojines de dos tonos enteros, que se encuentren en el estampado del mueble.