Un púgil chileno recibió una brutal paliza en la que debía ser última pelea y no contento con ello, está pidiendo autorización de las autoridades deportivas para una revancha que le permita colgar dignamente los guantes.
La pelea, además, terminó en una batalla campal en la que el más perjudicado fue el hermano del boxeador.
Juan Nahuel, el boxeador, cayó en el segundo asalto de la pelea que se desarrollaba en la localidad chilena de Nuevo Imperial y, de inmediato, su familia y los habitantes emprendieron contra el rival, un combatiente foráneo, ocasionando una batalla campal en pleno coliseo.
Un hombre que intentó apaciguar los ánimos terminó noqueado por un hermano de Nahuel, quien lo dejó inconsciente sobre la lona durante media hora.
El asunto no queda ahí, pues Nahuel está solicitando que le permitan una nueva pelea para poder despedirse dignamente del cuadrilátero.