Lo único cierto ahora es que Luis Miguel está internado en la clínica Cedars-Sinaí en Los Ángeles. Lo demás se ha puesto en entredicho ante las distintas versiones que han empezado a lanzar los medios mexicanos.
Las primeras informaciones de la prensa azteca aseguraban que el cantante había sufrido una reacción gástrica debido a unos medicamentos que estaba tomando para tratarse una bacteria que se le detectó en los pulmones.
Sin embargo, la versión del programa “El Gordo y la Flaca”, de la cadena estadounidense Univisión, ha perdido peso ante otras dos hipótesis que manejan otros medios.
Una de ellas es que el intérprete se encuentra grave debido a ciertas complicaciones por una presunta cirugía estética a la que se habría sometido el cantante en Beverly Hills. Según el sitio de internet AOL Latino, citado por Excelsior de México, Luis Miguel decidió realizarse una liposucción en el abdomen y unos retoques en el rostro para lucir mejor en la celebración de sus 40 años, este 19 de abril.
Otra versión que se maneja es que al artista le pasó factura una supuesta adicción a la cocaína. Hasta el momento, no hay una versión oficial al respecto. Inclusive se especula con que Luis Miguel ya habría salido del hospital, pero aún son solo rumores.