“Las autoridades estadounidenses e iraquíes deben tomar todas las medidas necesarias para investigar todas las alegaciones formuladas en esos informes” confidenciales publicados por Wikileaks, exhortó el martes en un comunicado la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay .
Pillay igualmente pidió a los gobierno de Washington y a Bagdad que “lleven a la justicia a los responsables de homicidios ilegales, las ejecuciones sumarias, la tortura y otros graves ataques a los derechos humanos”.
De acuerdo a los últimos archivos secretos difundidos por Wikileaks, militares estadounidenses mataron a 680 civiles iraquíes inocentes, entre ellos 30 niños, en puestos de control en el país árabe. Los militares, que habían recibido órdenes de disparar contra todo vehículo que no se detuviese en esos controles, mataron casi seis veces más civiles que insurgentes.