Un raudo ex ministro de Vivienda, Francis Allison, llegó esta mañana a la 58 Fiscalía Penal de Lima, que despacha el fiscal Juan Fernández, para declarar en el proceso que se le sigue por sus vínculos con Business Track (BTR), empresa dedicada al chuponeo y a la cual asesoró. La investigación es por los presuntos delitos contra la administración pública, lavado de activos y corrupción de funcionarios.
Antes de ingresar al edificio del Ministerio Público, Allison se limitó a declarar que el dinero que le fue incautado en el aeropuerto de Miami, cuyo origen ha sido cuestionado, no tuvo origen ilícito y que no tiene nada que esconder.
“He venido voluntariamente a declarar y a aclarar las imputaciones que me han hecho (…) voy a luchar por mi honor y por la justicia que está de mi lado”, dijo.
La semana pasada la esposa de Allison, Carla Robbiano, no acudió a la citación que le hizo el fiscal por encontrarse mal de salud.
A esta hora Allison continúa en el interior de la fiscalía.