Parque Nacional de Jaú: La mayor reserva selvática de Brasil está ubicada a 220 kilómetros de Manaos, en el estado de Amazonas. Este enorme parque nacional tiene una gran biodiversidad y es hogar de pumas, jaguares, delfines rosados, tortugas y guacamayos, entre otras especies de animales. Entre las principales actividades que se pueden realizar aquí están el avistamiento de flora y fauna, el trekking y los paseos en canoa. Al Parque Nacional Jaú se puede llegar por vía fluvial o terrestre y está abierto de 7 a.m. a 6 p.m. Quienes deseen alojamiento deben buscar hospedaje en los municipios de Novo Airão o en Barcelos. La mejor época para visitar este paraíso natural es de julio a noviembre.
Parque Ecológico de Janauari: Aproximadamente a una hora de Manaos viajando en bote está este parque –uno de los atractivos más visitados de la ciudad- cuya superficie se extiende por tierra firme e inundada. Además de ver el paisaje desed los miradores, el recorrido se puede hacer en canoa. Así se puede apreciar la selva en toda su dimensión y transitar por los sinuosos caminos que parecen delinear la planta llamada Victoria amazónica, un lirio o nenúfar gigante de agua que puede alcanzar los siete metros de diámetro cuya flor –que solo vive tres días- nace blancas y luego toma una tonalidad rosa oscuro. Las agencias de viaje ofrecen tours de un día.
Parque Nacional Pico da Neblina: Está situado al norte del estado de Amazonas, cerca de la frontera con Venezuela, y debe su nombre al mayor pico que hay en Brasil: Pico da Neblina (3014 metros de altura). A este parque nacional se accede por vía aérea desde Manaos o por vía fluvial. Aquí los visitantes podrán disfrutar de un sobrecogedor entorno natural y apreciar diversas especies de flora y fauna. Los amantes de la aventura tendrán aquí la oportunidad de realizar rutas de trekking. En la cercana comunidad de San Miguel da Cachoeira hay albergues para los turistas.